LA DOLOROSA (1787)

Autor:  Roque López Hernández ( Murcia, 1747-1811)

La Dolorosa. Fue tallada en 1787 por Roque López Hernández, el más reconocido de los discípulos de Francisco Salzillo, y su entrega y traslado tuvieron lugar el 2 de abril del mismo año desde el convento de Santa Clara La Real hasta el del Carmen. Sigue la tipología de la Virgen de los Dolores creada por su maestro, que tanta fama y éxito le proporcionó. Es imagen de vestir, que luce habitualmente vestido rojo y manto azul. Ofrece los brazos abiertos, con las palmas de las manos hacia arriba y la mirada en el cielo, lo que unido a la boca entreabierta y unos grandes ojos, de los que resbalan lágrimas de cristal, permite transmitir al espectador un dolor desgarrado por la muerte del Redentor.-

Imagen de vestir en madera de ciprés policromada. Peso: 23´8 Kg. Dimensiones: 1´66 x 0´62 x 0´60 mts.

Esta iconografía de María en el camino del Calvario ante la inminente Crucifixión de su Hijo, es la realista expresión de angustia y dolor de una madre. Sus brazos abiertos se elevan al cielo en una súplica, mientras las lágrimas derramadas y grandes ojos de cristal brillan y lloran bajo la iluminación de las velas. El rojo de su amor y el azul de la pureza, la visten y preparan para el posterior luto en la soledad.

Paso:

El trono realizado por José Jiménez Arróniz y dorado por Riera en 1892 es el único de la procesión que se salvó de la Guerra. Cuenta con ocho candelabros capaces para un total de ochenta y ocho tulipas conteniendo velas, mientras que en la Virgen se alza sobre un pedestal soportado por cuatro grifos, seres mitológicos con cabeza de águila y garras de león. Veinticuatro nazarenos-estantes portan este bellísimo paso

Textos: Antonio Barceló López